Sube tus defensas con estos desayunos

Bowl de frutas y yogur griego

Este combo hecho bowl actúa como una barrera que resguarda al organismo de las bacterias “malas”, gracias a la cantidad de probióticos y vitaminas con que está elaborado.
¿Cómo prepararlo?
Toma un bowl de tamaño pequeño a medio y cubre la mitad con yogur griego sin azúcar. La otra mitad la llenarás con un mix de frutas o alimentos para subir tus defensas, como papaya, arándanos frescos, kiwi, entre otros. Ahora, añade un poco de semillas de girasol, copos de avena o nueces trozadas y finaliza espolvoreando tus superfoods favoritos, como cúrcuma o espirulina.

Muffins de coliflor

Los beneficios de la coliflor en la salud son muy potentes al momento de subir las defensas, pues sus propiedades protegen los tejidos de los agentes externos y crean una armadura del sistema inmunológico.
¿Cómo prepararlos?
Bate 3 huevos, una taza de coliflor (sin tallo y sin exceso de agua), un puñado de acelgas, ½ cucharadita de ajo en trocitos, 1 cucharadita de queso rallado y sal y pimienta al gusto. Después, coloca la mezcla en un molde para muffins previamente enmantequillado y hornea durante 20 minutos, a 250ºC.

Pancakes de almendras

La almendras estimulan los niveles de leucocitos en el cuerpo, los cuales nos defienden de las bacterias y virus, ¿ya lo sabías? ¡Cómelas a lo largo del día!
¿Cómo prepararlos?
Mezcla una taza de harina de almendras (o almendras hechas polvo), 2 huevos, una cucharada de mantequilla, un chorrito de esencia de vainilla, ½ cucharadita de bicarbonato de sodio y 3 cucharadas de leche de almendras. Luego, vierte la mezcla con un cucharón sobre un sartén, a manera de hot cakes, y come con berries o tu fruto rojo favorito.

Jugo anti-virus

Lucha contra los virus del ambiente con este poderoso jugo antioxidante y desinflamatorio, que está cargado de vitamina A, B, C y E, así como fibra y hierro.

¿Cómo prepararlo?
En un procesador, tritura 3 zanahorias medianas, ½ manzana roja, ½ betabel, una ramita de apio y el jugo de un limón. Bebe el zumo sin colar y, si el sabor se te hace muy fuerte, agrega el jugo de 2 naranjas para dulcificar.

Huevo a la mexicana

Esta receta mexicana cuenta con alimentos ricos en vitaminas que mejoran el trabajo del sistema inmune, además de que te mantiene saciada por un buen rato.
¿Cómo prepararlo?
Calienta un sartén con aceite de oliva y sofríe ½ taza de jitomate picado, 2 cucharadas de cebolla en trocitos y 1 o 2 chiles serranos en cuadritos. Luego, añade 2 huevos previamente mezclados, condimenta con sal y pimienta al gusto y disfruta con tu infusión preferida.

Smoothies ideales para el desayuno

¿Qué podría ser más sencillo? Un puñado de ingredientes, puestos en una licuadora y el resultado un batido suave, deliciosos y lleno de vitaminas. Todo vale: fruta fresca  o congelada, leche, yogur,leche de soja, los frutos secos. Se hace un gran desayuno  (especialmente para usted que nunca toma un desayuno), además es una comida rápida o un aperitivo ideal.

Los batidos o “Smoothies” también le ayudan a cumplir con deber de comer una fruta al día (dos a cuatro porciones), mientras aumenta sus proteínas, vitaminas, minerales, antioxidantes y el consumo de fibra. Además, puede personalizar sus batidos para satisfacer sus necesidades – ya sea de energía para un entrenamiento o concentración para el trabajo.

Comience con las tres recetas en esta páginas, y añada cualquiera de los siguientes “impulsores” para obtener más alimentos nutritivos:

* Linaza: comida rica en omega-3, ácidos grasos de gran alcance que fortalecen la inmunidad y promueven la salud del corazón y las arterias, añadir 1-2 cucharadas (por cucharada: 34 calorías, 3.5 g de grasa, 2 g de carbohidratos, 2 g de proteínas, 2 g de fibra) .

* El germen de trigo: excelente fuente de fibra, ácido fólico y la vitamina E antioxidante, batido de arriba con 1-2 cucharadas (por cucharada: 25 calorías, 0.5 g de grasa, 3 g de carbohidratos, 2 g de proteínas, 1 g de fibra).

* Leche en polvo: excelente fuente de grasa, proteína de alta calidad, añadir 2-4 cucharadas (por cucharada: 15 calorías, 0 g de grasa, 2 g de carbohidratos, 2 g de proteínas, 0 g de fibra).

* Leche de soja: rico en isoflavonas-que ayudan a construir la masa ósea, reducen el riesgo de enfermedades cardíacas, y puede impedir el crecimiento de tumores malignos y reducir los sofocos en mujeres menopáusicas, reemplazar la leche o yogurt con leche de soja (por taza: 110 calorías, 2 g de grasa, 20 g carbohidratos, 3 g de proteínas, 0 g de fibra).

* Acidophilus en polvo * Ayuda a mantener el equilibrio de la flora intestinal; promueve las bacterias sanas que luchan bacterias “malas” en el intestino. La forma en polvo proporciona una concentración mucho más alta de los organismos que desee que el yogur o la leche acidophilus. Siga siempre las recomendaciones de la etiqueta de acidophilus en polvo.

¿Qué es el muesli?

¿Qué es el muesli?

Es un alimento de origen suizo en cuya composición forman parte cereales integrales, frutas, frutos secos, azúcar moreno o miel.
Es un preparado ideal para tomar en el desayuno y merienda, y es aconsejable para personas de cualquier edad.

Origen del muesli

Como ya hemos dicho este alimento es de origen suizo y fue descubierto por el doctor Max Bircher-Benner en una de sus frecuentes excursiones por las montañas de los Alpes.

El médico suizo encontró en uno de sus paseos a un pastor que le ofreció compartir su cena: una papilla de trigo molido con leche endulzada con miel y una manzana.

El pastor explico al doctor que tomaba este alimento dos veces al día: por la mañana y por la noche y que su padre ya se alimentaba de esta manera.

La curiosidad del doctor le llevó a investigar y descubrió que en las diferentes regiones de Suiza eran muchas las personas que tomaban este tipo de alimento: cereales variados, leche fresca, fruta y en ocasiones nueces.

El doctor probó diferentes combinaciones e impuso el muesli como desayuno a los pacientes de su clínica con muy buenos resultados.

Hoy día el muesli se consume en todas partes y lo podemos encontrar en cualquier supermercado aunque si queremos consumir un muesli de absoluta confianza lo mejor que podemos hacer es prepararlo nosotros mismos.

Composición nutricional del muesli

El muesli es un alimento muy completo, ofrece al organismo todos los nutrientes y la energía que necesita para funcionar a pleno rendimiento.

Al formar parte de su composición tantos alimentos diferentes cuando tomamos muesli estamos ingiriendo:

  • Vitaminas procedentes de los cereales: vitamina A, E, B1, B2, B12, fósforo, albúminas, fibras, etc.
  • Vitamina B2, sales minerales y lípidos procedentes de los lácteos y frutos secos.
  • Hierro, potasio, glúcidos, vitamina C, proteínas, hidratos de carbono etc., que le proporcionan la fruta fresca, la miel y los frutos secos.
Información dienut

Propiedades del muesli

Si decidimos incluir el muesli en nuestra dieta estaremos aprovechando los múltiples propiedades que el muesli nos ofrece, entre ellos.

  • Aporta una gran cantidad de energía al organismo.
  • Es un alimento rico en fibra, lo que lo hace recomendable en casos de estreñimiento.
  • Su consumo aporta al organismo una gran cantidad de vitaminas.
  • Es muy recomendable su consumo durante el embarazo y en periodos de lactancia.
  • Ayuda a mantener una buena salud ocular y a mantener la piel en muy buen estado.
  • Mejora el índice glucémico en personas que sufren diabetes (según los ingredientes que utilcemos).
  • Su consumo nos ayuda a tener una buena salud cardiovascular.
  • Es un alimento con propiedades antioxidantes.

Nuestro consejo

Siempre podemos adaptar el muesli a nuestras necesidades concretas y quitar o añadir aquellos alimentos que más nos gusten o necesitemos.

Avena con miel y manzanas

 
 
 
Platillo para el desayuno.  Receta reducida en grasas y calorías. Excelente fuente de fibra.
3 ½ taza de leche sin grasa o descremada
1/3  taza de manzanas secas
¼ de taza de miel
½ cucharadita de canela en polvo
¼ de taza de pistaches
2 tazas de avena sin cocer
1. Pon la leche, las manzanas, la miel y la canela a hervir en una cacerola de 3 litros. Agrega la avena y vuelve a hervir. Reduce a fuego medio y cocina, revolviendo ocasionalmente, por 5 minutos o hasta que la mayoría del líquido se absorba.
2. Retira la cacerola del fuego. Deja reposar la avena hasta que llegue a la consistencia deseada.
3. Sírvela en plato hondo y adórnala con los pistaches.