De acuerdo a un pequeño estudio realizado por investigadores australianos, publicado en el American Journal of Clinical Nutrition, beber un vaso de leche descremada en el desayuno, en lugar de jugo de fruta, ayudaría a las personas a sentirse más satisfechas hasta la hora del almuerzo.
En el estudio en el que participaron 34 adultos con sobrepeso, los investigadores hallaron que los participantes generalmente se sentían más satisfechos en la hora del almuerzo, lo cual, según los científicos, podría deberse a que las proteínas de la leche serían más efectivas para satisfacer el apetito de las personas que los azúcares del jugo de fruta.
De hecho algunos estudios previos han sugerido que las proteínas en general satisfacen más y actúan como supresores más fuertes del apetito que los carbohidratos.
En la investigación se observó que las calorías consumidas en el almuerzo eran mayores entre los participantes que habían bebido jugo de fruta que en los tomadores de leche.
La doctora Emma R. Dove, de la University of Western Australia en Perth, indicó que usualmente las personas evitan los productos lácteos cuando quieren reducir calorías y perder peso. Sin embargo, el mensaje principal del estudio es que los lácteos reducidos en grasa, como la leche descremada, ayudarían a mantener el apetito de una persona bajo control cuando se usan en lugar de un producto más azucarado con cantidad similar de calorías.
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