Caldo de pollo con jengibre

6 porciones
Ingredientes:
5 lt. de agua
5 kg. de rabadillas de pollo
1 zanahoria en cubos
1 tallo de apio picado
½ cebolla
Clavo al gusto
Tomillo al gusto
Mejorana al gusto
Pimienta negra entera al gusto
1 pieza de jengibre picado
1 taza de arroz blanco previamente cocido
Hojas de albahaca al gusto
200 grs. de queso panela en cubos
Procedimiento:
Lava las rabadillas perfectamente y elimina las vísceras. Agrega al agua fría y cuece durante 20 minutos a fuego alto. Espuma con frecuencia. Baja el fuego y añade zanahoria, apio, cebolla y jengibre. Sigue espumando y cuece 20 minutos más.
Agrega la muñeca de especias (clavo, tomillo, mejorana y pimienta negra). Cocina otros 20 minutos.
Retira las rabadillas.
Información dienut

Calditos no, Papillas sí, a los seis meses de edad

A partir de los seis meses de edad, los niños deben empezar a comer alimentos sólidos sin dejar de lado la lactancia materna que deberá continuar hasta donde sea posible. El doctor Enrique Massa Silva, médico pediatra especialista en alimentación infantil, recomienda que los alimentos deben tener buena cantidad de calorías que no se encuentran en los calditos.

Se trata de una dieta mixta porque las verduras tienen poco contenido calórico aunque contienen vitaminas, pero si se mezcla con el tubérculo que puede ser papa, camote o yuca, y agregarle carne. La leche es un buen alimento pero es baja en hierro porque se requiere de carne, entendiéndose carne de pollo o res, e hígado.

La introducción de los primeros alimentos semisólidos tiene una función más de aprendizaje que de nutrición, pero la alimentación básica del bebé seguirá siendo la leche.

Cuando el bebé comienza a introducir sus primeros alimentos, comienza a formarse el hábito alimenticio que lo acompañará toda la vida.

Hay que tener en cuenta que al niño se le debe dar siempre primero la papilla de verduras y en otro momento la papilla de frutas que por sí misma tendrá dulce y que seguramente será la preferida por el infante. Es mejor no añadirle azúcar y quizá una pizca de sal a la papilla de verduras.