¿Alguna vez has entrado a una tienda de zapatos deportivos y te has sentido abrumado ya que no sabes qué zapato escoger? Con tantos tipos de zapatos, precios diferentes y publicidad llamativa, no es para menos pensar que al comprar tal o cual marca te convertirás en un mejor deportista.
Pero, para que logres seleccionar el mejor zapato atlético es necesario que aprendas un poco sobre tus pies, el deporte o la actividad a la que te dedicas y los diferentes tipos de zapatos que existen.
¿Cómo es tu pie?
Lo primero que tienes que saber es si tienes un arco alto, medio o bajo. Para saber esto puedes humedecer la planta de tu pie descalzo y hacer una huella sobre una superficie dura. Deberás escoger una superficie donde la huella se pueda ver con facilidad, como un pedazo de cartulina o papel a color. Si la porción delantera de tu pie y talón se unen por una línea delgada, tus pies tienen un arco alto. Si tu huella se asemeja más bien a la forma de tu pie completo, tienes un arco bajo. Un arco medio es una combinación de los dos. Si el arco de tu pie es alto esto significa que no son muy flexibles y necesitarás un zapato con buena amortiguación. Si tienes un arco bajo, o los pies planos, significa que tus pies son demasiados flexibles, por lo que necesitarás zapatos que controlen sus movimientos. Si tienes un arco medio prueba con un zapato que proporcione estabilidad.
¿Dificultades con tu pie?
También debes tener presente si has tenido problemas con los pies en el pasado. Por ejemplo, si has sufrido un esguince o te has torcido el tobillo quizás prefieras un zapato de talla alta que sostenga mejor los tobillos. Además, si en algunas ocasiones te duele el arco, quizás necesites zapatos que te ofrezcan soporte especial. Si sufres de juanetes es preferible adquirir zapatos más anchos en el área de la punta de los pies.
El zapato y tus actividades
El tipo de zapato que selecciones tiene que adaptarse a la actividad o actividades que realizas más a menudo. Por ejemplo, si normalmente participas en varias actividades por un período de tiempo extendido, lo más seguro necesitarás unos zapatos diseñados para todo uso. Sin embargo, si participas en alguna actividad específica tres o más veces por semana necesitarás zapatos que sean aptos para ese deporte en particular. Escoger los zapatos atléticos adecuados te ayudará a evitar lesiones, tales como esguinces del tobillo.
En cambio, si participas en actividades de alto impacto, como correr, trotar o aeróbicos, necesitarás zapatos con una buena amortiguación que absorba los impactos. Para los caminadores asiduos es importante que busquen zapatos que ofrezcan absorción adicional de impacto en el talón y, además, deben asegurarse de que las suelas proporcionen una pisada fácil en la punta del zapato. Si practicas deportes de cancha, como el tenis o el básquetbol, necesitarás zapatos que mantengan el tobillo estable debido a los frecuentes movimientos laterales. La suela de este tipo de zapato no debe ser muy gruesa.
Recomendaciones esenciales antes de pagar
La Sociedad Ortopédica Americana del Pie y del Tobillo (The American Orthopaedic Foot and Ankle Society) ofrece ciertas recomendaciones con el fin de obtener un buen calzado:
- Asegúrate de medir tus pies en el momento en que estén más grandes, como al final del día o luego de correr, caminar o después de un juego o una práctica.
- No te olvides de medir ambos pies porque quizás uno sea un poco más grande que el otro. Es preferible que tomes en cuenta la medición mayor y no la menor. Debe sobrar al menos un centímetro de espacio entre el dedo gordo y la punta del zapato.
- Se recomienda comprar media talla o una talla más grande que la que usualmente usas para evitar que te salgan ampollas o pequeños hematomas en las uñas de los dedos.
- Al probarte los zapatos deportivos, acuérdate de usar las medias que normalmente usas al hacer ejercicio.
- Pruébate varios pares de zapatos. Las tallas pueden variar dependiendo del fabricante y deberías probarte ambos zapatos al mismo tiempo para asegurarte que te queden cómodos en ambos pies. Luego, trota en la tienda con los zapatos puestos para asegurarte que se sientan bien bajo impacto.
Recuerda además que cuando te pruebes unos zapatos deportivos éstos tienen que sentirse cómodos en el arco y a lo largo de toda la planta del pie, además de mantener firme el talón. Es importante que los talones no se deslicen. Si eres mujer, puedes buscar modelos diseñados especialmente para los pies de las mujeres, ya que tienen talones más angostos.
Por otro lado, también tienes que usar tus zapatos deportivos durante un tiempo antes de ponértelos para realizar una actividad en particular. Por ejemplo, no se aconseja usar los zapatos nuevos si vas a participar en un maratón. Tienes que darle tiempo a tus zapatos para que se adapten a tus pies.
Tampoco se recomienda que mantengas un par de zapatos deportivos por mucho tiempo. En la mayoría de los zapatos la amortiguación cede luego de haberlos usado de 500 a 800 kilómetros. Dependiendo de tu nivel de entrenamiento, esto pudiera llevar de 3 meses a un año. Con el fin de extender la vida de tus zapatos podrías tener dos o tres pares y alternarlos.
Algunas tiendas de zapatos deportivos cuentan con personal capacitado que te pueden ayudar a escoger los zapatos que se adapten mejor a tus necesidades, pero igual debes informarte bien antes de ir a las tiendas. Si tienes en cuenta tu tipo de pie, las actividades que realizas y lo que buscas exactamente en un par de zapatos deportivos, será mucho más fácil tomar una decisión y te sentirás menos abrumado(a).