Almuerzo escolar, sano y apetitoso

La empresa de alimentos California Raisins en asociación con una nutricionista latina ofrecieron algunas recomendaciones para crear menús sanos y apetitosos para los niños que comienzan su nuevo año escolar.

 

«Es imperativo que los padres se involucren en la salud y bienestar de sus hijos, ya que ellos juegan un papel significativo en ayudarlos de muchas maneras a escoger comidas saludables», señaló hoy Claudia González, quien además de tener una maestría en comunicación es nutricionista registrada.

 

«Por lo general yo les digo a los padres que se concentren en lo que «sí se puede» en vez de lo que «no se puede», como por ejemplo, en tener el menú de almuerzos de la escuela en su cocina, repasarlo con sus hijos y comentar con ellos lo que escogerán en la cafetería de la escuela», recomendó la experta en un comunicado.

 

Otro punto importante a tener en cuenta para la preparación de los desayunos y los almuerzos de los niños, es planificar con la «regla de los 3 grupos alimenticios», de acuerdo con la experta.

 

González sugiere que al preparar los almuerzos escolares de los pequeños o incluso para comidas en casa, se seleccionen por lo menos 3 grupos alimenticios entre harinas, proteínas y productos lácteos y frutas y vegetales.

 

Recomendaciones como hablar con los pequeños sobre las opciones nutritivas de alimentos -en lugar de ofrecerles desagradables sorpresas a la hora del almuerzo- e involucrarlos en la elección de alimentos sanos, pueden crear la diferencia entre un menú alimenticio y otro dañino para la salud.

 

Igualmente es importante, sugiere la experta, conversar con los niños los beneficios que los alimentos traen su vida. Explicarles -por ejemplo- cómo el desayuno da energía para las actividades la mañana y ayuda a estar más preparado para el esfuerzo académico, utilizando palabras adecuadas a su edad, puede ser muy conveniente para un niño.

 

La dieta de la infancia influye en el posterior desarrollo escolar

Una dieta inadecuada en los primeros años de la infancia tiene efectos en el posterior desarrollo escolar de los niños, según indica un estudio publicado en el Reino Unido.

 

La investigación, realizada por expertos de las universidades inglesas de Londres y Bristol, señala que los pequeños que a los 3 años consumieron mucha comida basura -como alimentos muy procesados o con alto contenido de sal y azúcar- progresaban menos en el colegio.

 

Los expertos hallaron que, en comparación con otros niños, los que tomaron más cantidad de comida basura a esa edad tenían un 10 por ciento menos de probabilidades de alcanzar los niveles de desarrollo esperados entre los 6 y los 10 años.

 

También comprobaron que el régimen alimenticio en años posteriores no tenía tanta incidencia en el desempeño en la escuela.

 

El trabajo presentado se basó en los datos recabados por un famoso estudio de la Universidad de Bristol llamado «Niños de los 902, que sigue el desarrollo de 14.000 niños desde su nacimiento en 1991 y 1992.

 

Para llegar a sus conclusiones, los investigadores tuvieron en cuenta otros factores que pueden afectar al desarrollo escolar infantil, como unos bajos ingresos de los padres o malas condiciones de vivienda.

 

Según la experta en nutrición Pauline Emmett, de la universidad de Bristol, el estudio «muestra una sólida asociación» entre hábitos alimenticios en los primeros años y el posterior desarrollo escolar, e indica que «las pautas de las primeras comidas tienen efectos duraderos, al margen de cambios posteriores en la dieta.

 

«Es muy importante que los niños tengan una dieta equilibrada desde la primera infancia si quieren sacar el máximo provecho de la educación», subrayó Emmett.