En el antiguo Egipto, en la Grecia clásica y en el Imperio Romano, la miel era un tesoro de alimentación y belleza. Por ello, la mielha tenido múltiples aplicaciones beneficiosas para diversas dolencias, desde resfriados, dolores de dientes, úlceras, erupciones e incluso para tratar diversas alergias y furúnculos.
La miel es un energizante totalmente natural que se puede consumir para enfrentar un día de gran actividad y también disfrutar como una dulce recompensa después de un largo día de trabajo. Sin importar si la actividad que realizas es ir al gimnasio o salir a caminar, una cucharada de miel en el agua que tomas te dará ese impulso que necesitas para mantenerte con motivación y energía.
También puedes usar esa energía extra para hacer otros cambios fáciles, tales como cocinar después del trabajo en vez de comprar comida preparada para el almuerzo o la cena. ¡Hacer tu comida no sólo te ayudará a reducir calorías sino también a quemarlas, pues estarás moviéndote de aquí para allá!
La miel es una fuente de energía rápida, fácil, deliciosa y totalmente natural, ya que tiene una particular composición de carbohidratos a base de una combinación de azúcares naturales con pequeñas cantidades de antioxidantes, enzimas, minerales,vitaminas y aminoácidos. Sin importar el tipo de ejercicio que realices, los carbohidratos estimulan las contracciones musculares para ayudar a mantener el nivel de actividad y, finalmente, a lograr tus metas de fitness.