Albondigas con chile poblano

 
 
 
 
Ingredientes:
Para las albondiguitas:
200g de carne molida de res
½ taza de arroz al vapor
1 pieza de huevo
¼ taza de cebolla picada
¼ taza de perejil picado
Aceite de oliva
Para el caldo
4 piezas de jitomate
3 piezas de chile poblano en rajas
1 taza de zanahoria en cubitos
1 papa cocinada cortada en cubitos
Aceite de oliva
2 litros de caldo de pollo
Sal y pimienta negra
Procedimiento
Para las albondiguitas, mezclar todos los ingredientes y salpimentar.
Formar las bolitas de carne y cocinar en un sartén con aceite de oliva,  hasta que estén doradas por fuera.
Para el caldo, hervir los jitomates hasta que se suavicen ligeramente. Licuar y colar.
Cocinar las verduras en una cacerola con aceite de oliva
Agregar el puré de jitomate y caldo de pollo.
Dejar hervir durante 3 minutos a fuego bajo.
Para servir, repartir las albondiguitas en platos hondos y posteriormente, agregar el caldo con las verduras.
Servir.
Para limpiar los chiles poblanos te recomendamos rociarlos con PAM® Original y luego asarlos en un comal  hasta que se queme la piel para poder limpiarlos; otra opción es comprarlos congelados y listos para usar.

Aguacates rellenos de germinado de alfalfa

 
 
 
Ingredientes:
2 Aguacates
2 Huevos duros
2 Cucharadas de vinagre de sidra
1 Diente de ajo grande
200 Grs. de GERMIPACK DE ALFALFA CON CEBOLLA
8 Hojas de lechuga
Sal
Pimienta
Preparación:
Se machaca el ajo
Se pican los huevos duros
Se cortan los aguacates en dos y se vacían cuidadosamente, cortando la pulpa en daditos
Se mezcla delicadamente el aguacate, el ajo, el huevo duro, el vinagre, dos terceras partes de los germinados de alfalfa con cebolla, la sal y la pimienta
Se rellenan las cuatro cortezas de aguacate con esta mezcla
Se disponen dos hojas de lechuga lavada para cada mitad situando encima los medios aguacates
Se espolvorean por encima con los germinados restantes.
¡Listo!

Agua antioxidante de alfalfa

 
 
 
Ingredientes:
200 Grs de Germipack de Alfalfa
Azúcar o Miel al gusto
Jugo de limón al gusto
1 litro de agua
Preparación:
Se vierte el Germipack de Alfalfa en la licuadora
Se le agrega 1 litro de agua
Se integran los demás ingredientes
Se le agregan uno hielos o bien se mete al refrigerador
Se adorna con rodajas de limón
¡Listo! Tómese bien fresca.

Ejercita tus brazos

 
 
 
Si escuchas por ahí el mito de que si te ejercitas con implementos como las pesas te pondrás musculosa, nada más lejos de la verdad, lograrás músculos fuertes, pero no voluminosos.
Lo que sí debes tomar en cuenta es que el trabajar con resistencia ayudará a tu cuerpo a estar fuerte, tus músculos sostendrán mejor tus huesos y evitarás lesiones graves, no olvidando que mejorarás tu postura, que es muy importante para no irse deformando. Por ejemplo el caminar erguida y no encorvada, sentarse derecha y no desparramada…
Realizando ejercicios controlados y sencillos, pero sobre todo, siendo constante, lograrás fortalecer tu cuerpo.
Los ejercicios que a continuación te sugiero están dirigidos a fortalecer los tríceps. Ya sea que te ejercites en un gimnasio, o en tu casa en un parque, al aire libre.
Los implementos que puedes utilizar son:
Mancuernas
Ligas
Pelota de gel
Para iniciar debes calentar el músculo que vas a trabajar, recuerda que son los tríceps.
Estira uno de tus brazos hacia el lado contrario y sostenlo con el otro brazo, mantenlo ahí unos 30 segundos y haz lo mismo con el otro brazo. Repite tres veces de cada lado.
Realiza los ejercicios que a continuación se describen, pero sin peso.
Una vez concluido el calentamiento podrás ejercitar el músculo. Recuerda que con el calentamiento preparas a tus músculos, en este caso el tríceps, para un trabajo mayor. Así evitarás lesiones.
Primer ejercicio:
Toma una mancuerna puede ser de medio kilo, un kilo, cinco kilos, el peso que te permita ejecutar el ejercicio con un rango de movimiento completo o una pelota de gel, que también las hay de diferentes pesos.
Siéntate en un banco, con la espalda recta pegada al respaldo y el abdomen contraído. Eleva la mancuerna con las dos manos arriba del nivel de tu cabeza sin que se despeguen tus brazos de la misma, esto es cerca de tus orejas.
Baja la mancuerna a la altura de la nuca y súbela con movimientos firmes y controlados.
En caso de ejercitarte al aire libre, este ejercicio lo puedes hacer de pie, si no hay una banca donde puedas realizarlo.
Posición correcta: separa las piernas a la altura de tus hombros, contrae el abdomen y flexiona levemente las rodillas.
Otra variante en la posición de pie, es utilizando una liga larga.
Coloca la liga bajo tus pies, písala firmemente para que no se zafe. Toma los extremos con tus manos. Pasa la liga hacia tu espalda y llévala por encima de tu cabeza recordando de no despegar tus brazos de tu cabeza. Sube y baja los brazos con movimientos firmes y controlados y sobre todo mantén la liga firme.
Otro ejercicio en posición de pie:
Toma dos mancuernas, recuerda el peso, no te lesiones.
Flexiona tus brazos a la altura de tus pectorales sin despegar tus brazos del cuerpo, extiéndelos llevándolos hacia atrás.
Comienza tu rutina con tres series de 10 a 15 repeticiones cada una.
Puedes ejecutar un sólo ejercicio e ir integrarlo los otros conforme avances. Es importante un descanso entre serie y serie de máximo 60 segundos, así obtendrás mejores resultados.
Recuerda que al terminar de ejercitarte deberás estirar el músculo. Eleva tu brazo, pegado a la cabeza y flexiona hacia atrás. Cambia de brazo. Repite.
Para seguir trabajando al músculo y que no se acostumbre a la rutina, ve incrementado peso. Recuerda que deberá ser el que te permita realizar las repeticiones con el rango de movimiento completo. Esta es una forma segura de ejercitar al músculo, que no se estanque y evitar lesiones.
Recuerda, cuida tu cuerpo, que es tu casa…

 
 
 
 
 
 
 
 

¿Qué es y por qué votar por CP?

 
 
Cabo Pulmo es una reserva marina ubicada en Baja California Sur que alberga los arrecifes coralinos más importantes del Golfo de California. Los habitantes de esta Área Natural Protegida renunciaron desde hace más de 15 años a las actividades pesqueras para dedicarse a la conservación y el ecoturismo logrando una recuperación sorprendente de la salud del arrecife y del número y tamaño de las especies que lo habitan.
Es además un ecosistema de gran fragilidad ante un complejo turístico de grandes dimensiones. La región tiene una capacidad de carga limitada al tener, entre otras características estar ubicada en área semidesértica.
Por ser la perla del acuario del mundo, por su biodiversidad, por el oxígeno que nos brinda este bosque de corales, por el compromiso de su gente y porque Cabo Pulmo es patrimonio no sólo de sus habitantes sino de la humanidad, es responsabilidad de todos protegerlo.

¡Votemos por Cabo Pulmo! ¡Votemos por su conservación!

Espuma de limón

 
 
 
Ingredientes
1/4 taza de leche descremada
2 cucharaditas de edulcorante
2 yemas
1 cucharadita de gelatina sin sabor
3 cucharadas de jugo de limón
3/4 cucharadita de cáscara de limón rallada
2 claras
1/4 taza de crema de leche
2 cucharadas de nueces picadas
Preparación
Remojar la gelatina en el jugo de limón y dejar reposar por 5 minutos. En una olla pequeña, poner la leche con el edulcorante y dejar cocinar hasta que se haya disuelto. Retirar del fuego.
Batir las yemas con un tenedor y agregar poco a poto y sin dejar de batir a la mezcla de la leche con cuidado que no se corten. Luego, añadir las cáscaras. Aparte, cocinar en baño de maría la gelatina hasta que se disolver o en el microondas por 30 segundos. Añadir a la mezcla.
Refrigerar por 30 minutos. Pasado el tiempo, agregar las nueces y revolver muy bien. Aparte, batir la crema dulce en su punto. Mezclar las claras con la crema de leche batida, en forma suave y envolvente y agregue a la mezcla anterior en forma suave y envolvente sin batir. Colocar en una copa bonita. Refrigerar por lo mínimo dos horas.

 
 

Dieta anticansancio

 
 
 
Se sugiere esta dieta a todas aquellas personas que se encuentran cansadas (tanto física como mentalmente) o fatigadas la cual está constituido por un menú balanceado y energético.
Es importante incluir en este tipo de dieta alimentos integrales que la enriquece en fibra y en vitamina B1.  Esta vitamina está directamente vinculada con el funcionamiento de las células del sistema nervioso y una deficiencia de ella se relaciona con síntomas como pereza, cansancio y depresión.
A la hora del almuerzo, siempre es importante incluir, si se desea aportar energía para el resto del día, una buena dosis de hidratos de carbono complejos.  Por ello, se debe incluir arroz, papa o espagueti.
Para que la asimilación de los alimentos se realice de una manera adecuada, es importante que almuerces en un ambiente tranquilo.
Una cena ligera que tenga lugar como mínimo dos horas antes de ir a la cama, ayuda a conciliar el sueño.
Desayuno
1 taza de té o mate con leche
1 tajada de pan o galletas integral
Media mañana
1 banano
Almuerzo
1 pechuga a la plancha sin piel
1 taza de arroz
Ensalada de verduras
Merienda
1 tajada de queso descremado
1 tajada de pan integral con miel de abejas
1 huevo cocido
Media tarde
1 manzana
Cena
1 ensalada de lechuga
1 hamburguesa de lenteja
3 ciruelas pasas

 

¿Existen los alimentos antiestrés?

 
 
Ningún nutriente puede en sí mismo atribuirse efectos antiestresantes. Sin embargo, hay un hecho irrefutable: el placer que nos produce comer ciertos alimentos provoca en nuestro organismo una secreción de “opiáceos endógenos” que nos proporciona sensación de bienestar e incluso cierta euforia.
Pero no podemos olvidar que los gustos de cada uno son diferentes y cada persona tiene sus propios alimentos antiestrés. Aunque en general la mayoría se decanta por los dulces y las grasas, hay a quien le puede encantar el pan o las frutas. El problema está en controlar las cantidades…
Más que alimentarse de ciertos alimentos, la mejor estrategia frente al estrés es comer bien y de todo, ya que de ello depende que nuestras defensas estén altas.
Los nutrientes que contribuyan a mantener fuerte nuestro organismo y, por tanto, a paliar el estrés, son:
Las vitaminas. La A, la C y la E combaten directamente la formación de radicales libres. La A se obtiene de las zanahorias, el melón, el brócoli, las coles de Bruselas, las espinacas y los boniatos. La C está presente en los cítricos y en el brócoli, los pimientos, el melón y el tomate. Para obtener vitamina E hay que consumir frutos secos y aceites vegetales. Las vitaminas del grupo B fortalecen el sistema nervioso central y tienen un efecto sedante. Se encuentran en la levadura de cerveza, lácteos, carne, cereales, aguacate, repollo y judías verdes.
Minerales. Potasio, magnesio y calcio son imprescindibles porque estimulan la reacción orgánica frente a las hormonas que el cuerpo segrega como respuesta al estrés. Por otro lado, tienen propiedades relajantes y mantienen a raya el ritmo cardíaco. Frutas, verduras, cereales enteros y carne son alimentos ricos en potasio. El magnesio se encuentra en las verduras (puede desaparecer en la cocción, por eso es aconsejable consumir esta agua en forma de sopa o salsas). Los frutos secos, cereales y semillas también lo contienen, pero hay que consumirlos enteros porque el magnesio se destruye en el proceso de trituración. El calcio, por último, es conocido como “el tranquilizante natural” y, desde luego, pocas cosas tienen un efecto tan sedante como beber un vaso de leche tibia antes de acostarse.
Alimentos relajantes. Algunos alimentos estimulan el buen funcionamiento de las células nerviosas ayudando al organismo a mantenerse relajado mientras que otros favorecen la irritabilidad. Entre los alimentos “relajantes” están el plátano, las almendras, el germen de trigo, la levadura de cerveza y las semillas de girasol.
Chocolate: ¿amigo o enemigo?
Es uno de los alimentos más utilizados por miles de mujeres para calmar los nervios. Incluso se ha llegado a afirmar que crea adicción. Efectivamente, el cacao contiene sustancias de efecto calmante, además del placer que produce su sabor. Pero ojo: si abusas de él añadirás calorías extra a tu organismo e incluso puedes producir un efecto excitante. Un par de onzas de chocolate negro (menos calórico) pueden ayudarte a calmar la ansiedad y proporcionar combustible a tu cerebro sin aportar apenas calorías.
Lo mismo nos ocurre con los dulces: aparte del chocolate, es lo que más nos apetece comer cuando estamos nerviosos. La explicación es que los glúcidos provocan un aumento de la cantidad de insulina en sangre, lo que permite la secreción de triptófano, un aminoácido que se transforma en serotonina, que calma la depresión y la ansiedad. Los azúcares de digestión rápida producen este efecto casi inmediatamente, por lo que no debe extrañarte que te apetezca comer dulce cuando estás triste. Una vez más, debes utilizarlos de forma inteligente para no darle a tu cuerpo grasas y calorías en exceso.
Además de poner en peligro nuestra salud y nuestro sistema nervioso, estar estresados puede hacernos atacar la nevera cuando la ansiedad nos puede. Por ello, hay que convertir la comida en una aliada. Además, hay ciertos alimentos que pueden ayudarnos a mitigar el estrés.
Comer de forma equilibrada es fundamental para mantener en orden tu cuerpo y tu mente y evitar que el estrés afecte a tu estómago, tus defensas y tu sistema nervioso. De tus menús depende buena parte de tu estabilidad física y emocional.
Tus compras antiestrés
Imprime esta lista y llévatela al súper al próxima vez que vayas a la compra. Que no se te olvide pasar por estas secciones:
– frutas y verduras. Que no falten en tu carrito todas aquellas ricas en vitaminas del grupo B y C: coles, espinacas, lechuga, tomate, naranjas, kiwis, etc.
– sección lácteos: las vitaminas y minerales aportados por la leche son indispensables para evitar el estrés. Que no falten en tu nevera yogures normales o desnatados, leche semidesnatada y quesos (escoge los bajos en grasas)
– en la carnicería: la carne es rica en vitamina B3, que ayudará a tu organismo a luchar contra las tensiones externas. Lo mejor: las carnes magras, sobre todo la ternera, el jamón serrano y los embutidos ibéricos, el pollo o el pavo
– en la pescadería: el pescado contiene montones de vitaminas, minerales y oligoelementos excelentes para combatir el estrés. Por su relación calidad-precio, los pescados azules como el boquerón, la sardina o la caballa, son los mejores.
– en la panadería: la fibra es absolutamente necesaria para el buen funcionamiento de tu organismo y, sobre todo, para proteger tu estómago, uno de los principales afectados por el estrés. Mejor el pan normal que el de molde, y mejor aún el integral. Echa también al carrito cereales completos para el desayuno y biscotes integrales para la merienda o el tentempié (con atún llenan y engordan muy poco).
– conservas y congelados: además de sacarte de un apuro, las conservas de atún, sardinas o berberechos son un alimento excelente y bajo en grasas. De la sección de congelados te interesan las verduras y productos del mar, olvídate de los platos precocinados. Llévate también botes de legumbres para preparar en ensalada, y de verduras para tomar con vinagreta
– sección bebidas: además de la leche, no te olvides de las infusiones: tila, poleo y valeriana. Respecto a los zumos, los envasados tienen demasiados azúcares. Los refrescos: mejor ligth o sin cafeína. Compra cacao para chocolatear la leche cuando estés decaída y cereales solubles para sustituir el café. Para darte un capricho: un buen vino.
– condimentos: no te olvides de coger una ramita de perejil, ayuda a absorber el hierro, un mineral imprescindible para estar fuerte. Añadir especias como el oréganos o la canela te harán regalarte los sentidos y te harán sentir mejor
– ¿sección caprichos? Todo el mundo tiene sus particulares alimentos antiestrés (chocolate, dulces, frutos secos…). Echa algunos al carrito pero sabiendo que son para casos de emergencia y en pequeñas dosis
Un truco antiestrés y anticalorías. Ten siempre a mano una barrita de regaliz por si te asalta el hambre entre horas: además de calmar el hambre sin aportar apenas calorías, tiene una poderoso efecto antiestrés.
¿Sabías que?… Cuando a nuestro cuerpo se le exige una carga extra de energía por presiones en el trabajo por estrés emocional, el organismo agota las reservas de energía y, en consecuencia, las reservas de vitamina B, lo que nos vuelve vulnerables a padecer depresión, insomnio o irritabilidad. Para evitarlo, debes incluir en tu dieta alimentos como el brócoli, acelgas y espinacas, los cereales y las leguminosas, que contienen el complejo de vitamina B.
Un consejo: si estás sometida a situaciones de estrés o te sientes agotada mental y físicamente, toma levadura de cerveza, es un suplemento alimenticio rico en proteínas y vitaminas que tiene propiedades antiestresantes y desintoxicantes.

Rollitos de salmón con espinaca

 
 
 
 
INGREDIENTES
400 gr. de filete de salmón ahumado
2 tazas de espinacas cocidas al vapor y finamente picadas
2 yemas de huevo
aceite de oliva
8 tiras de queso mozzarella
1 rama de cebolla
sal y pimienta
PROCEDIMIENTO
En una sartén coloque un chorrito de aceite y a fuego medio dore la cebolla finamente picada. Incorpore las espinacas y cocínelas durante 10 minutos. Coloque esta preparación en un bol y con la ayuda de una batidora hágala puré. Añada las yemas de huevo y sazone con sal y pimienta. Corte los filetes de salmón en 8 porciones. Coloque sobre cada una de éstas el puré de espinaca y las tiras de queso. Enróllelas sobre sí mismas y envuélvalas en papel aluminio. Póngalas en el congelador hasta que se endurezcan. Saque los rollos del congelador y córtelos en discos y sirva con salsa de yogurt.
PARA LA SALSA DE YOGURT
Haga una pasta en una batidora o procesador de alimentos con 1 cucharadita de pasta de ajo, 1 taza de yogurt natural y sal y pimenta al gusto.

 
 

Crema de manzana y calabacitas

 
 
 
INGREDIENTES
8 calabacitas (calabacín)
1 manzana roja en trocitos, sin piel ni semillas
1 cdta. de mostaza
1/2 taza de leche
3 tazas de agua
1 tableta de concentrado de pollo (consomé de pollo)
200 gr. queso ricota
1 cebolla perla picada finamente
1 chorrito de aceite de oliva
PROCEDIMIENTO
Caliente en una cacerola grande el aceite y sofría el él la cebolla, las calabacitas y la manzana hasta que estén transparentes. Agregue las 3 tazas de agua y deje cocer durante 5 munutos. Retire del fuego y reserve. Licúe la leche con el queso, hasta que esté cremoso. Agregue el concentrado de pollo y el sofrito. Licúe hasta que se incorporen todos los ingredientes. Regrese esta preparación a la cacerola y agregue la mostaza. Bata hasta que se incorporen y deje cocer a fuego lento removiendo de vez en cuando, hasta que estén bien calientes, pero sin dejar de hervir. Sírvala y decore con cáscaras de las calabacitas cocidas al vapor y gajos de manzana salteados en aceite de oliva