Cada día que pasa la ciencia descubre más acerca de nuestras mentes y nuestros cerebros, cómo funcionan y particularmente por qué no trabajan o están alejados de sus niveles óptimos.
Los avances en las neurociencias revelan la fina conexión cerebro-cuerpo, algo que ha sido comprendido muchos siglos antes por los creadores orientales del Tai Chi, la yoga y otras disciplinas dedicadas a la salud de cuerpo-mente-espíritu.
Por otra parte, la acumulación de tensión y ansiedad propia de la vida moderna hace que nuestros cerebros se apaguen, se desconecten. La gimnasia cerebral nos da respuestas prácticas y sencillas para equilibrar los efectos de la tensión y alcanzar un estado óptimo –estar en forma– para aprender, pensar y concentrarnos en cualquier momento… en cualquier lugar…
Hasta hace dos o tres décadas existía en Occidente una muy pobre comprensión de la importancia de la conexión cuerpo-mente, (concepto del que hablamos en el artículo del mes pasado). Paul Dennison, un visionario profesor de California, reconoció la conexión cuerpo-mente y decidió utilizarla para ayudar a personas con problemas de atención y aprendizaje. Ahora, veinte años después, y gracias al apoyo de la investigación científica, tenemos a la Gimnasia Cerebral como el resultado de los esfuerzos pioneros del Dr. Dennison.
La gimnasia cerebral se está difundiendo muy rápido; se enseña en la actualidad en 38 países y está beneficiando significativamente a gente de todos los estilos de vida.
¿Qué es la gimnasia cerebral?
La base de esta disciplina es una serie de 26 movimientos corporales sencillos, diseñados para ayudarnos a conectar ambos hemisferios de nuestro cerebro.
Muchas personas aprenden los movimientos básicos, ayudándose a sí mismas a estar más centradas, enfocadas y atentas. Cuando se utilizan los movimientos es posible realizar cambios poderosos y permanentes en áreas donde nos sentimos poco confiados o incapaces. Los ejemplos de cambios positivos que se pueden lograr incluyen mejorar la habilidad para organizar tu vida, tu trabajo y tu tiempo, transformar tu comunicación con otras personas, restablecer el equilibrio en situaciones muy emocionales, o superar tus miedos a hacer algo para lo cual siempre te habías sentido incapaz.
Todos nos llegamos a sentir tensos, estresados o aprehensivos. Es natural. La próxima vez que te sientas así, primero bebe agua pura. Otras bebidas no son adecuadas, porque inician el proceso digestivo. Es muy importante mantenernos hidratados: sabemos en la actualidad que la deshidratación es una de las principales causas del estrés.
Lo siguiente es colocar las manos frente a ti, con las palmas hacia arriba; júntalas por sus bordes, entre la base del dedo meñique y el comienzo de la muñeca, como si estuvieras aplaudiendo. Haz este movimiento enérgicamente pero con suavidad, unas treinta veces. Este movimiento tranquilizador anula la respuesta natural al estrés del cuerpo que genera adrenalina y la sensación de «pelear o huir». Inténtalo y observa cómo te sientes.
¿Quién desarrolló la gimnasia cerebral?
El doctor Paul Dennison, quien se interesó en hallar formas de enchufar los cerebros de las personas que acudían a él con problemas de comportamiento, comunicación o aprendizaje: dislexia, hiperactividad, atención deficiente, etcétera.
A principios de los ochenta Dennison intentó ayudarlas con diversas rutinas de movimientos y ejercicios tomados de Oriente, de la danza moderna, el atletismo y muchas otras fuentes. Investigó la kinesiología (ciencia que estudia el movimiento muscular en el cuerpo), el desarrollo de los niños, psicología, neurología y otras disciplinas en busca de formas para afectar positivamente al cerebro y estimularlo.
Con este enfoque ecléctico de ensayo y error, adaptó y simplificó una serie de ejercicios que fueron dando crecientes resultados positivos en la gente con que trabajaba. Finalmente llegó a los 26 movimientos clásicos que enseñamos hoy.
Siendo él mismo disléxico, el doctor Dennison ayudó inicialmente a jóvenes calificados como fracasos por el sistema educativo convencional. Los movimientos de la gimnasia cerebral fueron exitosos con ellos, quienes se volvieron a sentir capaces de participar e integrarse a la escuela, la familia y la sociedad en forma más armoniosa y efectiva. En la actualidad se enseña también a estudiantes de altos logros y sin problemas de aprendizaje, para desempeñarse en forma más eficiente y efectiva.
¿Para qué sirve la gimnasia cerebral?
La gimnasia cerebral te ayuda a lograr la comunicación entre tu cerebro y tu cuerpo, lo cual significa eliminar estrés y tensiones de tu organismo al mover energía bloqueada y permitiendo que la energía fluya fácilmente por el complejo cuerpo-mente.
Todo lo que has aprendido a lo largo de tu vida se ha almacenado en tu cuerpo-mente en diversas «avenidas» nerviosas (neurológicas).
Si has aprendido a hacer algo mal o te cuesta trabajo realizarlo (por ejemplo, hablar frente a un grupo de personas), tienes el «programa interno erróneo» almacenado dentro de ti. Este mismo programa o huella impresa en tu sistema nervioso se activa cada vez que intentas realizar esa acción, con el resultado habitual. Con la gimnasia cerebral te ayudamos a remplazar el programa viejo e ineficiente por una red neuronal mucho más fuerte, motivadora y efectiva. Conforme usas este nuevo «programa», éste se fortalece más y las conexiones entre las partes de tu cerebro requeridas para una tarea en particular se logran con más rapidez y facilidad.
En suma, la Gimnasia Cerebral te ayuda a aprender con efectividad y holísticamente al utilizar la totalidad de tu cerebro y tu cuerpo.
¿A qué ayuda la Gimnasia Cerebral?
Como ya había mencionado, se inició como una forma de ayudar a la gente con verdaderos problemas en la escuela. En la actualidad la enseñamos a todas las personas desde cuatro a ciento cuatro años de edad, en empresas privadas, escuelas y universidades con estudiantes excelentes. La Gimnasia Cerebral te enseña una mejor manera de manejar y superar la sensación de estar rebasado, abrumado, que sientes cuando estás bajo tensión, y es una perspectiva de nuevas posibilidades en todos los aspectos de la vida y el trabajo.
La Gimnasia Cerebral te ayuda a concentrarte, a equilibrarte, a pensar, recordar, ser creativo, escuchar o leer. Practicándola puedes realizar cualquier actividad en la que tengas dificultades. Todo esto puede sonar a «demasiado bueno para ser verdad» o muy simple, pero la Gimnasia Cerebral está probada y logra que toda tu mente y todo tu cuerpo trabajen en armonía para ti. Los terapeutas con conocimientos en Gimnasia Cerebral han ayudado a gente a enfrentar retos específicos, como poder decir algo difícil a alguna amistad o pariente, o mejorar la calidad de la escucha o de la vista. Otros usan la Gimnasia Cerebral para superar limitaciones emocionales, familiares y psicológicas, hábitos, bloqueos que los han aquejado por un largo tiempo. Algunas personas piensan que la Gimnasia Cerebral es sólo para personas con «problemas de aprendizaje», pero esto es un error, la Gimnasia Cerebral es para todos.
¿Por qué es necesaria la Gimnasia Cerebral en la actualidad?
Vivimos tiempos y sociedades que operan demasiado desde el hemisferio izquierdo del cerebro, y nuestra cultura, sistemas educativos, lugares de trabajo y actitudes nos exigen terminantemente tener más logros para poder competir. Se espera que analicemos, seamos lógicos, racionales, midamos, juzguemos y clasifiquemos para ser organizados y eficientes. Todas éstas son las cualidades del hemisferio izquierdo del cerebro, y por supuesto que son válidas; sin embargo, sin cualidades más juguetonas y expansivas que los contrarresten, las funciones igual de importantes del hemisferio derecho que equilibran a las del izquierdo pueden estar totalmente desbalanceadas y conducir a los problemas tan conocidos en la modernidad. De hecho, muchas de las tensiones y ansiedades surgen en personas que tienen literalmente bloqueadas las funciones de alguno de los hemisferios cerebrales. Ve el mundo que nos rodea y date cuenta del número de personas que están fuera de equilibrio y no están conscientes de ello. Mucha gente está cada día más y más tensa, más crítica y atada a los reglamentos, y repite los mismos hábitos y pensamientos, o es hipersensible, distraída e incapaz de organizar su tiempo o de terminar las cosas que empieza… no necesitan ser así. La Gimnasia Cerebral las ayuda a desbloquearse, a usar más flexiblemente su mente.
«El movimiento es la puerta de entrada al aprendizaje».