Para comprender la importancia que tiene la alimentación de los niños en edad preescolar, es necesario conocer de manara básica los cambios por los que atraviesan entre los 2 y los 6 años, porque eso nos permitirá relacionar esos cambios con sus necesidades nutricionales.
Durante este rango de edad, el crecimiento acelerado que tuvo durante los dos primeros años de vida disminuye considerablemente. El crecimiento ya no es continuo sino por etapas; es decir, habrá meses en los que no crezca ni suba de peso y otros en los que crezca mucho. De esas etapas dependerá en parte el hambre que tenga el niño. Habrá épocas en las que coma poco y otras en las que se acabe todo lo que tiene en su plato o que, inclusive pida mas.
El niño en edad preescolar es un torbellino de actividad, es explorador y utiliza todas las funciones que su cuerpo le proporciona, como correr, saltar, brincar, etc. Su interés primordial es descubrir el mundo y todo lo que le rodea; entender su entorno. Los periodos de concentración son cortos, por lo que se vuelve casi imposible mantenerlo sentado, ya sea a la mesa de comida o en reuniones.
La desaceleración en el crecimiento, unida a su interés por explorar, tener su propia personalidad y demostrar su independencia, provocan en el niño disminución del apetito y desinterés hacia la comida. De ahí que muchas veces tenga mucha hambre y otras no quiera probar bocado. No hay que angustiarse si un día se salta una comida completa o de plano no quiere comer nada; debemos recordad que su cuerpo es absolutamente capaz de regular la cantidad de alimento que generalmente necesita. Esto es normal y por lo general no tiene repercusiones en el peso y talla normales. El niño tiene un mecanismo natural para regular su ingesta alimenticia, comerá cuando tenga hambre o cuando su cuerpo requiera energía y dejara de comer cuando no necesite alimento. Asimismo es normal que durante esta etapa el niño adopte algunos alimentos como sus favoritos o preferidos y no quiera comer otros; y de pronto, de la noche a la mañana, ya no quiera volver a probar esos alimentos.
Otra característica común de la edad es la negativa a probar alimentos nuevos o diferentes. Sin embargo, si el ambiente es adecuado y si al niño le ofrecen alimentos nuevos con frecuencia, poco a poco se irá familiarizando con ellos hasta incorporarlos.
En esta etapa se forman los hábitos de alimentación que el niño seguirá el resto de su vida. Los hábitos que se crean dentro de la familia son importantísimos, pues el niño los aprenderá; la relación que la familia establezca con la comida será la pauta para que el niño construya sus propias convicciones y hábitos. El niño preescolar aprenderá y aplicará poco a poco lo que perciba en su familia, así como entre sus compañeros de escuela, en torno a su alimentación. Por ello resulta esencial que se mantenga durante las comidas un ambiente de paz y armonía, que ese momento no se convierta en motivo de discusión no control.
Durante esta etapa el niño busca demostrar su independencia, parte su aprendizaje lo obtiene atreves de su experiencia propia, de sus aciertos y errores; el niño hace pruebas, sondea cual es el comportamiento adecuado y cual no lo es. Procuremos entender la etapa y disfrutarla como una época llena de sorpresas y crecimiento; en conveniente hacer conciencia de que la participación de los padres en este momento de su vida será de gran impacto para el futuro; establezca límites y reglas que estructuren y den soporte a lo que se quiera inculcar
En esta época el preescolar debe sentase a la mesa con la familia, debe poder maniobrar los cubiertos y el vaso adecuadamente, aceptar la variedad de platillos, descubrir nuevos sabores y cordialmente evitar otros. El niño preescolar desarrollara sus propias ideas sobre su alimentación, sobre su escuela, sus amigos, etc. y en esta etapa aprenderá y mejorara todas las áreas de su vida, incluyendo la alimentación. Es importante no regañar al niño durante las comidas para mantener un ambiente de tranquilidad; que la experiencia de comer en familia sea placentera y beneficiosa para todos.